¿Conocen la expresión “encontrar tu media naranja”? Bueno, yo creo en eso. Uno tiene una media naranja dando vueltas por la vida. Pero no es la fruta. La mitad de una naranja es la mitad de algo. No acompaña el todo, está incompleto y siempre será así. Necesita inevitablemente de otra mitad para existir en el mundo de las naranjas. Si no la encuentra, siempre va a ser la parte de una fruta que terminará pudriéndose.
Ahora, hablemos de la media naranja.
La media naranja no es la mitad de la media. Es la compañera de la media. La vida es mejor si andás con las dos medias naranjas puestas. Pero podés abrigar tu pie con una sola.La media no deja de ser media. Puede que se sienta sola, pero esta entera como para esperar el encuentro con su pareja.La media naranja se la banca, la media naranja es individual, ya existe y espera.Mantener completo un par de medias es muy difícil. Pensemos todas las medias que hemos perdido en la vida. O se destiñe una, o se rompe, o simplemente desaparece.No es tarea sencilla conservar el par completo. ¿Porqué debería ser simple encontrar a tu pareja en la vida? Hay que esperar. Obviamente, si sólo tenés una media naranja, el otro pie queda abandonado. Pero siempre uno encuentra soluciones, inconscientemente.Por lo tanto, podés ponerte otra media y unas botas que oculten las diferencias y si hace calor... ¡ojotas!Todo tiene solución.Tu media naranja, podrá ser más viejo, más joven, tener otra cultura, credo o realidad, pero está por ahí, en algún cajón. Esperándote.Puede que nunca la encuentres, suele pasar.Es muy difícil y a veces uno esta distraído y lo deja pasar.La mitad de la naranja te completa, pero eso es para gente incompleta. La media naranja, te acompaña en la vida.Por eso, si realmente te encontrás en los ojos del otro, animate. No hay tantas reglas. Estate atenta. ¿Te sentís como en casa cuando estás con él? ¿Te sentís contenida en sus ojos? No lo pienses más...
